Pasea distraída por la Avenida del Recuerdo y en un traspié cae, como Alicia, en un agujero. El lugar es frío, oscuro y arenoso, igual que la tierra recién labrada en tiempos de sequía.
Avanza con los brazos extendidos hacia los lados tocando paredes terregosas. De pronto, ve un tenue resplandor a lo lejos y, ligera, corre hacia él. Según se acerca descubre una luz que ilumina unas palabras. Cuando por fin atina a leer aquel cartel, se para en seco. Frente a ella, la Calle del Olvido.
Pequeño relato pero muy bien escrito
Narración muy bien escrita y la locución impresionante, no se está sacando todo el partido a esa preciosa voz.
Precioso relato Lucía. Digno ganador del pantagruelico . Enhorabuena